Tras una (tal vez demasiado) larga espera, ¡el nuevo Trajinando por el Mundo abre sus puertas!

Espero que os guste el diseño: no es nada especial, pero sí cambia un poquito con respecto al anterior. La intención era dar con un formato donde poder almacenar todo lo escrito hasta la fecha  y que al mismo tiempo me permitiese seguir publicando entradas más variadas, articulillos breves sin orden ni concierto, y sin que el resultado final fuese demasiado pastiche… Espero haberlo conseguido.

Yo creo que es fácil de usar, pero se admiten preguntas, y por supuesto, sugerencias. Básicamente, el mayor cambio es que la página de Inicio ya no muestra las tres últimas entradas desde el principio hasta el final (la lectura eterna…), y ha sido convertida en una especie de “Portada” donde, de un sólo vistazo, pueden verse los últimos artículos publicados, las entradas más populares, el índice por categorías, los accesos a redes sociales, etc.

Cambia también (creo que es comprensible) la distribución de las Categorías. Como ahora ya no es únicamente el blog de “un” viaje, he dividido las entradas por continentes y países, aunque también podrá accederse a ellas por temas concretos: “vuelta al mundo”, “preparativos”, “noticias”…

Por otra parte, tanto el Archivo del blog como los Enlaces a mis webs favoritas tienen ahora su propio apartado dentro del menú principal. Es que, si no, la barra lateral era infinita y me descuadraba la portada por completo; yo creo que así está mejor =) Pero lo dicho: si alguien tiene alguna idea diferente, ¡las sugerencias son bien recibidas!  (y si me he “comido” algún enlace importante, no me lo tengáis en cuenta, ¡dadme un toque para ponerlo!)

Por último, un aviso a todos aquellos que estuvieseis suscritos al Newsletter: si aún estáis interesados en recibir las actualizaciones en vuestro correo, tendréis que daros de alta de nuevo (formulario en la barra lateral), porque lógicamente del otro ya no vais a recibir nada…

Dicho esto, vamos a lo de verdad importante: ¿Qué podéis esperar de este blog a partir de ahora?

Cuando escribes un “diario” sobre un viaje concreto, y el viaje se acaba… el blog vive un momento de crisis evidente (por no mencionar la crisis del autor, jeje). Sin embargo, como ya dije antes de irme, mi intención es seguir viajando, y seguir escribiendo (aunque para ello tenga que fregar retretes en Surabaya); y como este espacio ya se ha convertido en una “prolongación” de mi propia persona, el blog no se cierra: seguiré escribiendo.

¿Sobre qué? Pues un poco de todo: A lo largo de estos meses he recopilado un puñado de anécdotas e historias a las que no pude dar salida en su momento debido a limitaciones obvias de espacio y tiempo… saldrán ahora. También creo estar en condiciones de dar algunos consejos sobre qué visitar en tal lugar, cómo ir a tal sitio…, que espero os sean de utilidad. En definitiva: una parte importante del contenido de ahora en adelante será un popurrí de anécdotas, reflexiones y algunas informaciones útiles sobre lugares concretos.

Por otra parte, como la vida sigue y no sólo del “vueltas al mundo” vive el hombre, también compartiré con vosotros mis futuras escapadas cuando las haya (¿Edimburgo? ¡Prepárate Martita! ;) ), no descarto un “Trajinando por Cantabria” (tomadme en serio: ¡de broma no tiene nada!) y lo que surja…

¿Conseguiré mantener vuestra atención de esta manera? Eso espero… De todas formas, para los escépticos, me guardo un as en la manga: el próximo “Viaje”. Tal vez algunos no lo recuerden, pero este blog (cuando aun no lo conocía ni mi madre) nació seis meses antes del inicio del viaje, con la intención de compartir con todo el mundo el proceso de preparación del mismo… Fueron exactamente seis meses, durante los cuales sólo me “siguieron” dos amigos, pero las entradas ahí están y, de hecho, ahora son de las que más visitas reciben…

Pues bien: hay un próximo viaje en mente. Un viaje planeado para el próximo mes de Junio (¿o será Mayo?), y que si bien no será tan largo como el anterior, si durará sus buenos cuatro o cinco meses… ¿El destino? Siberia. O concretamente, el Transiberiano. Sí, señores: no tengo un duro, pero el próximo verano partiré con la intención de hacer el Transiberiano, ida y vuelta, por tierra. Más información, en próximas entradas…

Con esto creo que lo he dicho todo: ya sabéis qué podéis esperar. ¿Os interesa lo que pueda rescatar del baúl de mis recuerdos? ¿Algún consejo para visitar tal o cuál sitio? ¿Queréis conocer Cantabria en mayor profundidad? ¿Ser testigo de cómo alguien que no tiene un duro se lo monta para, en seis meses escasos, reunir el dinero y prepararse para hacer el Transiberiano, cruzando Rusia, Mongolia, China (y vuelta), en un viaje estimado en cuatro o cinco meses? Pues estén atentos a sus pantallas, ¡esto acaba de empezar!