Esta vez no hay historia; en esta ocasión solo os envío una postal. Porque eso es Masuleh: un pueblito de postal.
Tal cual me lo describieron mis amigos de 2exploran, Masuleh es un encantador pueblo «donde el tejado de cada casa es el suelo de la calle siguiente». No era mi intención robarles las palabras: es que no hay otra forma de definirlo. Masuleh está construido completamente en vertical.
Y es bonito, mucho, ¿pero me ha merecido la pena ir hasta allí? Si estuviese haciendo una ruta por el norte de Irán sin duda es una parada inexcusable, pero desplazarse hasta allá, como he hecho yo, solo para verlo (diez horas de ida -con varios transbordos- desde Tabriz, y diez horas de «vuelta» -también con sus muchos transbordos- a Qom) es como hablar de ir desde Cádiz a Cantabria solo para ver Santillana del Mar. De locos.
La comparación me viene al pelo porque Masueh y Santillana del Mar se parecen mucho, al menos en concepto. Ambos son pueblos de un incalculable valor histórico convertidos en la actualidad en museos al aire libre; preciosos para pasar un par de días en pareja o familia, pero (siempre en mi opinión) decepcionantes para quienes estén buscando conocer la vida y costumbres del Irán más rural.
Los habitantes de Masuleh viven del turismo y, por tanto, lo que uno se encuentra al llegar allí no son hombres trabajando el campo y mujeres barriendo las puertas de sus casitas, sino decenas de tiendas de souvenirs y restaurantes a rebosar de turistas iraníes.
Y no está mal, como digo es un pueblo agradable, en cuyos alrededores además se pueden hacer muchas rutas de senderismo. Pero quizá no es esto lo que yo estaba buscando, ahora que ya tengo más que claro que este viaje mío en Irán no es un viaje de monumentos o museos: es un viaje de personas.
Como curiosidad, solo añadir que al ser Masuleh un destino popular de «turismo rural» entre los iraníes, más que habitaciones lo que se alquilan son casitas enteras, con su cocina, su salón con chimenea y sus varias habitaciones y baños. Como ejemplo aquí tenéis el que fue mi hogar por un día: un pequeño apartamento con preciosas vistas de las montañas que conseguí (regateando un buen rato) por 13 euros la noche.
Parece encastrado en la montaña, muy bonito :D
Me recuerda ligeramente a Valparaíso, acá en Chile, solo que allá es rural y con un color mucho mas sobrio. Que ganas de viajar a Irán y conocer a los persas.
Cuesta un huevo y parte del otro, llegar a ese lugar desde Rasht, pero vale mucho la pena,,, tambien te recomiendo a la bajada, una vista a Roudkhan Castle, desde el cruce de Fouman a Masouleh,,,hay muchos coches que suben gratis los 30 km
Saludos…
10. Horas de ida mas 10 horas de vuelta suman 20 , o lo que es lo mismo : un montón y, aunque bonito, no parece que te haya compensado. Pero bonito ES, y tu sacas partido a todo. Seguro que algún amigo surgió.
un lugar mágico para visitar, un pueblo rodeado de montañas con hermosas casas una encima de otra, si bien no es un lugar para todo tipo de viajero, me encantan este tipo de lugares que representan parte de la cultura de Irán.
muy bien escrito ku, ja,ja
Precioso lugar y colores, … la verdad que Irán es una gran desconocida, … aunque poco a poco cada vez leo más sobre el país y es cierto que tienen mucho mucho que ofrecer.
Gracias por compartirlo!.
Para quienes no podemos llegar a un lugar como este el ver las imágenes y leer tus descripciones es muy gratificante. !Gracias y que disfrutes cada aventura!
Carmen, enhorabuena por tu fantástico blog y por tus estupendos viajes. Tuve la oportunidad de escucharte en las jornadas de los grandes viajes hace un par de años en Madrid y puedo confirmarte que eres una inspiración para todos los que disfrutamos viajando! En un mes estaré por Irán y me gustaría incluir Masuleh al final de mi ruta. En referencia al alojamiento, ¿cómo o dónde lo conseguiste? El apartamento pinta genial y estaba pensando en algo así. Muchas gracias!!